lunes, 18 de abril de 2016

¿Pueden los terremotos tectónicos disparar actividad volcánica?

A raíz de los recientes sismos de gran magnitud ocurridos en Japón y Ecuador, se genera la duda de que algunos volcanes entren en erupción. 

Históricamente, las personas relacionaban las erupciones con terremotos, términos como "vena volcánica" a zonas donde hay aguas termales relacionadas con fallas geológicas son comunes, o que el terremoto de Cartago de 1910, fue producido por el volcán Irazú, eran algunos de las conclusiones populares, pero:

¿Pueden los terremotos tectónicos disparar actividad volcánica?



El geólogo y naturalista Charles Darwin en 1838 relata lo siguiente: "El objetivo de esta memoria es el describir los fenómenos principales que generalmente acompañan los terremotos de la costa occidental de América del Sur… Dichos fenómenos revelan de manera notable la conexión íntima que hay entre las fuerzas volcánicas y las de elevación". Este es el primer escrito científico que plantea el problema.

Cuando un sismo tectónico ocurre, los volcanes pueden ser afectados por el paso inmediato de las ondas sísmicas, esto se le conoce como esfuerzo dinámico, o por el proceso lento de reajuste de las capas rocosas, a esto se le llama esfuerzo estático. Por ende, podemos entender que un volcán puede tener cambios inmediatos o muy lentos (semanas, meses o años).

Hay algunos ejemplos en donde los terremotos tectónicos han generado importantes erupciones, como el sismo de Luzón (Filipinas) de 1990 (Magnitud 7,8), ubicado a unos 10 km del Monte Pinatubo y se considera como el disparador de la gran erupción ocurrida 329 días después del sismo. Otro ejemplo es el caso del terremoto de Hoei (Japón) de 1707 (Magnitud 8,7), ubicado a unos 15 km del Monte Fuji y que generó una gran erupción 49 días después.

Sin embargo, grandes sismos como el de Sumatra del 2004 con magnitud 9,5 o el de Japón de 2011 con magnitud 9,0, no generaron erupciones volcánicas en los meses siguientes.

No se ha encontrado una relación directa entre la cercanía de un sismo, ni de la magnitud del mismo y la ocurrencia de una erupción volcánica ni tamaño del evento eruptivo. Sino que más bien, todo va a depender del estado crítico en que se encuentre el volcán. 

Si el volcán no está en un estado crítico, sismos grandes no podrán generar erupciones. En caso contrario, si el volcán está en un estado avanzado de actividad, un sismo pequeño o grande podrían ser el paso que necesitaban para entrar en erupción. 

Generalmente, la respuesta es: tal vez, quizá, pero la única forma de saber si puede haber o no una erupción volcánica disparada por un terremoto tectónico es con un monitoreo volcánico intenso, acompañado del conocimiento de la tectónica que gobierna el edificio volcánico.

Para más información, les comparto un pequeño artículo científico en español, donde abordamos este problema, para los grandes sismos ocurridos en Centroamérica en 2012 y que provocaron cambios en la actividad de los volcanes.
En la fotografía, se muestra la erupción del volcán de Fuego (Guatemala) de 2012, ocurrida 8 días después del Terremoto de Sámara (Costa Rica) en setiembre del 2012, con una magnitud 7,6. Foto cortesía del INSIVUMEH.






8.

1 comentario:

  1. Buenos días! Basados en la información de la publicación, podríamos entonces decir con cierta seguridad que el enjambre sísmico entre el Irazú y el Turrialba de días anteriores tiene relación con el aumento en la sismicidad del Volcán Turrialba que el día hoy esta presentando incluso una señal de tremor??

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